La importancia de la caja chica en la tesorería de tu negocio
Sin importar el tamaño de tu empresa, su éxito se refleja en el estado de su flujo de caja, y una gestión profesional de la misma resulta en la buena administración de la compañía en general y una mayor rentabilidad.
Pero, desde siempre, esa ha sido un área de la contabilidad de las compañías donde se presentan las malas prácticas. Una de ellas es echar mano del dinero de la caja para la adquisición de artículos o servicios que no son necesarios para las actividades empresariales de la corporación.
Por tanto, la gestión de la tesorería es de vital importancia para todo tipo de compañías, desde pequeñas y medianas empresas hasta multinacionales.
Recuerda que uno de los factores que influyen para un óptimo crecimiento de la empresa es un estricto uso de la caja chica.
Mediante la automatización, la tecnología se ha convertido en una buena herramienta para transparentar y evitar los errores en el manejo del flujo de caja.
Algunas de las nuevas aplicaciones y funcionalidades que permite la tecnología incluyen la emisión de tarjetas corporativas, las cuales permiten un mejor control de los gastos de las personas autorizadas a usarlas y facilitan la tarea de cotejar, justificar y deducir fiscalmente, si es el caso, las erogaciones.
Además de que se mejora la productividad del departamento de contabilidad, la empresa tendrá mejor oportunidad de crecimiento, pues la tecnología abre una puerta a un sinfín de opciones para la interacción, que serán una piedra angular en la evolución de la organización.
Las ventajas de un buen manejo
Dos condiciones para la óptima gestión de la caja chica son que la persona encargada de llevarla sea honesta y ordenada, y ese buen manejo significará grandes ventajas para tu empresa, entre ellas:
- Registrar y justificar con facilidad los pagos menores.
- Asentarlos correctamente en los libros contables.
- Archivar los gastos en forma agrupada, lo que agiliza su deducibilidad.
- Mejorar la asignación y control de los presupuestos.
Esas herramientas y recursos tecnológicos, explotados al máximo, pueden hacer que tu empresa descubra su verdadero potencial y encuentre nuevas oportunidades.
Investiga qué sistemas y aplicaciones puedes introducir en tu negocio para que el manejo transparente y óptimo de su caja chica resulte en menores costos operativos, una mejor gestión de las finanzas y una mayor rentabilidad.
Recurre a empresas de servicios de software y de computación en la nube que te ofrezcan no solo innovación, sino también asesoría personalizada y acompañamiento durante las etapas de instalación, capacitación y ejecución inicial de sus sistemas.
La caja chica es indispensable para hacer compras menores que solo se pueden hacer en efectivo como los gastos en insumos de oficina y transporte para llevar a cabo las actividades productivas de la organización.
Del buen manejo de estos fondos depende que evites los desembolsos injustificados y los robos hormiga que, sumados, pueden representar importantes pérdidas para tu negocio.
Cuida tus recursos incluso en los pequeños gastos y estarás apuntalando la rentabilidad de tu empresa.
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