“La elaboración del -Despacho Celestial- es una clara manifestación de adaptación a los procesos de cambio sociocultural en el contexto urbano. En este sentido, cada curandero imagina una forma de su ideario y la plasma creando una suerte de parafernalia que está compuesta por elementos de origen animal, vegetal, mineral y otros ingredientes industriales, muchos de estos componentes pertenecen a la costa sierra y selva, también a los diferentes pisos ecológicos de nuestro Perú”.
EL “DESPACHO CELESTIAL”
Antropólogo Hugo Benny Elguera Mansilla
La elaboración del “Despacho Celestial” o “Mesa Celestial”, es una clara manifestación de adaptación a los procesos de cambio sociocultural en el contexto urbano. En este sentido, cada curandero imagina una forma de su ideario y la plasma creando una suerte de parafernalia que está compuesta por elementos de origen animal, vegetal, mineral y otros ingredientes industriales, muchos de estos componentes pertenecen a la costa sierra y selva, también a los diferentes pisos ecológicos de nuestro Perú. En su elaboración se muestra los cambios socioculturales y los procesos de adaptación, creación individual y colectiva, es decir, una forma de hibridación cultural. Al mismo tiempo, demuestra la complejidad del entorno social urbano; es decir, a mayor complejidad social mayores elementos se insertan en él.
En la elaboración se puede observar muchas formas simbólicas, a los que los curanderos urbanos les dan significados, como por ejemplo, las líneas imaginarias conocidas como los “ceques”, el feto de la llama, las conchas marinas, la coca, el colibrí, el “untu” o cebo de la llama, las plumas del cóndor, la cruz cristiana, etc. Elementos que siguen latentes en el imaginario de hombre andino, quienes constituyen aspectos simbólicos que se mantiene en el mundo andino contemporáneo.
En esta forma de pago a la tierra, está presente la idea de dispersión y concentración, la que se manifiestan durante la elaboración, donde el curandero, “maestro” o sabio (yachaq) controla y supervisa que todos los elementos estén conformes a su petición, también que todo se desarrolle de acuerdo al orden establecido por él, evitando que se incurra en el error o que algún elemento que se haya colocado en el despacho pueda caer o salirse del mismo. En este sentido, la idea de caos o dispersión es una muestra de negatividad, pérdida, fracaso o muerte, por otro lado, la idea de concentración es lo opuesto, se entiende como el orden, lo positivo, la ganancia y el control sobre las cosas y la naturaleza.
